Un ETF de gas natural invierte en contratos de futuros de gas natural u otros productos de inversión en un esfuerzo por seguir de cerca el precio de mercado del gas natural. Así mismo, se organizan como conjuntos de productos básicos, que emiten participaciones en sociedades limitadas en lugar de acciones. Estos fondos también pueden invertir en futuros de petróleo para calefacción, petróleo crudo y gasolina.
Comprendiendo en qué consiste un ETF de gas natural
Los inversores en fondos cotizados en bolsa de gas natural no son propietarios del activo físico, el gas. Más bien, poseen un conjunto de contratos de futuros que rastrean un índice de materias primas, que fluctúa según el valor subyacente de la materia prima.
Los ETFs que no realizan un seguimiento de las materias primas generalmente se componen de varios valores, como acciones, que comparten un perfil de inversión similar. El rendimiento de estas acciones impulsa el rendimiento del ETF.
A diferencia de las acciones y otros ETF, los ETF de gas natural reflejan el precio de una materia prima en lugar del rendimiento de un grupo de acciones. Esto hace que los fondos de gas natural sean vulnerables a los cambios de precio del gas natural en sí.
Conozca el potencial de riesgo a la baja
Además de ser susceptibles a la volatilidad de los precios de los productos básicos subyacentes, estos ETFs son más riesgosos que otros porque están compuestos por derivados, como futuros y swaps, que son especulativos.
Por supuesto, todas las inversiones conllevan cierto grado de riesgo; pero por su propia naturaleza, los derivados se encuentran entre las inversiones de mayor riesgo, y esto es especialmente cierto para los ETF de materias primas basados en futuros.
Los futuros son intrínsecamente riesgosos
Debido a que dependen de los futuros, los fondos de gas natural son susceptibles al contango, una situación en la que el precio de futuros de un producto básico es más alto que el precio al contado.
Cada mes, cuando vencen los contratos antiguos, los futuros se convierten en contratos nuevos. Los nuevos contratos tienden a tener precios ligeramente más altos que los antiguos. Por lo que cada rollo cuesta un poco más al ETF. Con el tiempo, estos aumentos de precios pueden sumarse para crear un gran lastre en el rendimiento del fondo.
Debido a que se basan en contratos de futuros y materias primas, invertir en ETF de gas natural conlleva ciertos riesgos.
Depende del clima
El clima también puede afectar el rendimiento de los fondos de gas natural. Si el clima es más cálido de lo habitual, los precios del gas natural pueden caer en picado.
Generalmente no son para principiantes
A los ETF de gas natural les fue bien cuando se abrieron por primera vez en la Bolsa de Valores de Estados Unidos (AMEX). Sin embargo, han tenido un viaje lleno de baches. Debido a su elevado factor de riesgo, los ETF de gas natural no son para todos los inversores.
No obstante, agregar exposición al gas natural puede tener sentido como parte de una estrategia de inversión bien diversificada. Tener una forma más líquida de acceder al gas natural como juego tanto especulativo como de cobertura puede ser una herramienta útil para los inversores minoristas e institucionales. Para el inversor individual, puede encontrar una serie de fondos de gas natural que puede utilizar de forma sencilla y segura.
